➤ 10 consejos INFALIBLES para tomar buenas decisiones en tu vida 👍

 

Claves para tomar decisiones difíciles



Cómo tomar buenas decisiones: 10 consejos INFALIBLES
 


¿No sabes cómo tomar buenas decisiones en tu vida? ¿Sientes que solo tomas malas decisiones? Es seguro que no eres consciente de cómo tomar buenas decisiones en tu vida.

Pero ¿Por qué es importante tomar decisiones en primer lugar?

Porque las decisiones forman nuestro destino. La mayoría de las personas piensan que sus circunstancias son las que define su destino, pero nada más lejos de la realidad.

Son nuestras decisiones las que definen nuestro destino. Desde esas pequeñas decisiones como qué comer, hacer ejercicio o ver TV, trabajar o holgazanear; hasta aquellas grandes decisiones como casarse con una persona o no, emprender o trabajar, etc.

Por esto es clave saber elegir adecuadamente. Es por eso por lo que te traigo este artículo con 10 consejos para tomar buenas decisiones en tu vida y así tomar las riendas de tu destino.

  

 

10 consejos para tomar buenas decisiones en tu vida

  

 

1. Ten claro tus objetivos

 

Cuando estés frente a una decisión difícil, pregúntate: ¿Esto me acercará o me alejará de mis objetivos?

Hacerte esta simple pregunta te ayudará mucho en tu toma de decisiones, ya que lo que queremos es lograr nuestros objetivos, ¿No?

Si tomamos decisiones que nos acerquen a nuestros objetivos, será una buena decisión, ya que lo que más deseamos es cumplir nuestras metas.

Por otro lado, si tomamos una decisión que nos aleje de nuestros objetivos, puede que no haya sido la mejor decisión posible.

Lectura recomendada: Cómo alcanzar cualquier objetivo que te propongas 

 

Parece que algo anda mal… ¡Revisa una vez más!
¡Éxito! Te he enviado un email de confirmación en donde sólo tendrás que hacer clic en el enlace para recibir tu Ebook. (arrástra el email a la bandeja principal si se coló en la bandeja de spam o promociones).

¿Quisieras alcanzar una vida plena y feliz?

Obtén GRATIS mi Ebook  «7 potentes tips que cambiarán tu vida» y descubre las claves que te ayudarán a vivir la vida que realmente mereces.

2. Guíate a través de tus valores personales

 

Nuestros valores personales, es decir, “lo que nosotros valoramos en nuestra vida”, son como nuestra brújula personal. Si uno de nuestros valores es la honestidad, no podemos tomar decisiones que impliquen deshonestidad, por ejemplo.

La clave consiste en definir unos valores, y tomar decisiones sólidas a partir de ellos. Por ejemplo, uno de mis valores personales es la salud. Por esto, nunca tomaré una decisión que implique un deterioro de mi salud.

 

¿Cómo defino mis valores personales?

 

Simple: toma una hoja de papel y escribe los valores que crees que llevarán tu vida a donde deseas que esté. Si uno de tus objetivos es leer 30 libros al año, uno de tus valores personales puede ser “crecimiento personal”.

Si eliges este valor, no podrás violarlo nunca. Es decir, nunca podrás tomar alguna decisión o acción que no esté alineado con el valor.

Pongamos otro ejemplo. Imagina que has escogido el valor de “salud”. A partir de ahora, no podrás tomar ninguna decisión que no esté alineado con salud.

Obviamente no somos perfectos y un día podemos fallar en el cumplimiento de nuestros valores, pero tu objetivo es estar lo más alineado posible con ellos.

Es hora de que definas los valores con los que quieres vivir. Coge una hoja y un lápiz, y anota todos los valores que quieres implementar a ti vida. Si quieres ser más compasivo, escribe el valor de la compasión. Si quieres ser más bondadoso, escribe el valor de la bondad, y así sucesivamente hasta que elijas todos los valores que quieres que rijan tu toma de decisiones.

Si no sabes muy bien cuáles valores escoger, aquí te dejo una lista de algunos valores interesantes:

 

  • Compasión
  • Contribución
  • Libertad
  • Crecimiento personal
  • Salud
  • Pasión
  • Valentía
  • Tolerancia
  • Respeto
  • Honestidad
  • Disciplina
  • Amor
  • Responsabilidad

 

Define tus valores y úsalos como una brújula personal para tomar decisiones. Cuando tengas que tomar alguna decisión, pregúntate: ¿Tomar esta decisión va alineada a mis valores personales? Si es que no, puede que no sea una buena decisión.

Tu objetivo aquí es que una vez tengas claro/a cuáles son tus valores, tomes decisiones a partir de ellos.

Lectura recomendada: Cómo definir tus valores y establecer prioridades 

 

3. Ten claridad sobre todas tus opciones

 

A veces pensamos que las cosas son blanco y negro, pero no es así. Hay muchas personas que se han arrepentido de no evaluar sus verdaderas opciones antes de tomar una decisión.

En vez de mirar las cosas en blanco y negro, busca los grises. Busca más opciones. Si no quieres elegir entre dos opciones, busca una tercera que te satisfaga más.

Mientras más opciones tengas, más oportunidades de tomar una buena decisión tendrás. Mira todas las posibilidades que tienes.

En vez de centrarte solo en A y B, busca una C y D, tal vez una de estas pueda ser una mejor opción.

La próxima vez que tengas que elegir entre dos opciones, pregúntate: ¿Son estas todas mis opciones? ¿Qué otras opciones tengo? ¿Qué otra opción puede satisfacerme más que estas?

 

4. Usa tu sistema de pensamiento lento

 

En su famoso libro “Pensar Rápido, Pensar Despacio”, Daniel Kahneman aborda el funcionamiento de nuestra mente a la hora de tomar decisiones de cualquier tipo.

Cuando estamos a punto de tomar una decisión, utilizamos dos tipos de pensamiento:

 

  • Pensamiento rápido (sistema 1 de pensamiento)
  • Pensamiento lento (sistema 2 de pensamiento)

 

El sistema 1 (también llamado pensamiento rápido) es automático, emocional, no requiere esfuerzo mental y saca conclusiones de manera automática. Es el responsable de crear sensaciones, intuiciones e intenciones erróneas.

Por su parte, el sistema 2 (también llamado pensamiento lento) es reflexivo y racional. Aunque es el responsable de las actividades mentales que exigen más esfuerzo, suele estar en modo de mínimo esfuerzo y sólo se activa ante actividades que requieren un esfuerzo mental.

El sistema 1 crea conclusiones de forma automática mientras que el sistema dos nos da respuestas conscientes.

 

La clave está en que cuando estemos frente a cualquier decisión, usemos nuestro sistema 2, o pensamiento lento, para tomar decisiones, y no nuestro sistema 1.

En vez de tomar una decisión de forma rápida, automática y emocional (sistema 1) debemos de tomar la decisión de forma más racional y analítica, visualizando todas nuestras opciones (sistema 2).

Aunque no tienes que usar tu sistema 2 de pensamiento en todas tus decisiones, cuando estés frente a una gran decisión (como comprar tu casa, casarte o invertir en alguna acción) uses tu sistema de pensamiento lento para analizar bien tus opciones.


Comprar libro "Pensar Rápido Pensar Despacio"

 

5. Coméntale a los demás sobre tu decisión

 

Antes de tomar alguna decisión, es recomendable saber qué opina otra persona acerca de esta.

Una persona que no seas tú puede hacer un análisis mucho más crítico (y no emocional) acerca de si la decisión que estás a punto de tomar es buena o no. algún amigo o familiar tuyo puede ver algo que tú no ves, y eso te puede ayudar un montón a tomar buenas decisiones.

Tienes que asegurarte que a la persona con la que vas a debatir tu decisión sea de confianza y quiera lo mejor para ti. Además, esa persona tiene que entender tus gustos y sueños.

Y, sobre todo, aunque la opinión de los demás te ayudará a tomar buenas decisiones, la decisión final la tomas tú y tu corazón, no tus amigos, ni tus hermanos, ni tus padres.


 
6. Ten en cuenta tus decisiones pasadas

 

Una de las cosas más valiosas que tenemos son nuestros errores del pasado. Nuestros errores nos ayudan a aprender, a tener una mejor visión del mundo, a tomar mejores decisiones.

Cuando estés frente a una gran decisión, mira a hacia atrás y observa las malas decisiones que has tomado.

Pregúntate si la decisión que estás a punto de tomar no repite ninguno de esos viejos errores del pasado. Recuerda que los errores son para ayudarte a tomar mejores decisiones, ¡Aprovéchalos!

 

7. No tomes ninguna decisión para agradar a los demás

 

Nunca, nunca, nunca debes tomar decisiones para agradar a los demás. Tomar decisiones así es una muerte a cámara lenta asegurada.

La única persona que sabe lo que realmente quiere es TÚ. Al carajo lo que digan los demás. ¿Quieres vivir agradando a los demás, o siendo feliz?

Si estás a punto de tomar alguna decisión solo para agradar a tus padres, familia o amigos, ¡PARA YA!

Elige desde tu corazón, no desde las opiniones de los demás. En serio, si de todas las ideas de este artículo solo te quedarás con una, que sea esta.

Aunque pienses que tus seres queridos saben lo que quieres, no es así. Ellos te dicen que hagas lo que ellos quieren que hagas, no lo que quieres realmente.

Así que sé valiente, y toma decisiones desde tu corazón, no desde la boca de los demás.

 

8. No tomes decisiones para evitar momentos difíciles

 

Otra clave es no tomar decisiones para evitar momentos difíciles. Otra muerte a cámara lenta…

Si quieres vivir una vida extraordinaria, si quieres alcanzar el éxito, si quieres hacer grandes cosas, tendrás que tomar decisiones que sean incómodas y difíciles.

No puedes quedarte en tu zona de confort. Tienes que crecer, y para eso, necesitas tomar decisiones que te conduzcan a zonas incómodas y difíciles. Tienes que convertir tu zona de incomodidad en tu nueva zona de confort. Solo así crecerás y evolucionarás.

Si te da miedo tomar decisiones que te conduzcan a situaciones incómodas, es una señal de que debes hacerlo. A partir de ahora, debes de ver los miedos como una luz verde de un semáforo, es decir, verlos como una señal de que debes hacer la acción que te da miedo y hacerlo ahora mismo, ya que mientras más dures en romper tus miedos, más grande se volverá el temor.

Así que ya sabes, la próxima vez que sientas miedo antes de tomar una decisión, sé consciente de que esa es una señal de que debes de tomar acción cuanto antes.

 

9. Visualízate después de tomar una decisión

 

Que fácil sería tomar buenas decisiones si pudiéramos ver qué sucedería en el futuro si tomamos alguna decisión.

Nunca fallaríamos al tomar una decisión. Lastimosamente, todavía no tenemos ese poder. Pero algo que, si tenemos, es la imaginación, y esta nos puede ayudar bastante.

Antes de tomar alguna decisión, imagínate en el futuro después de haberla tomado. Imagina cómo te sentirías, cómo vivirías, etc. Evalúa si eso es realmente lo que quieres.

Tal vez lo que imaginas no sea nada realista comparado con el futuro real, pero esto te puede ayudar a ver con más claridad cada una de tus opciones.

 

10. Elige desde el amor, no desde el miedo

 

Hay dos tipos de decisiones: buenas y malas. Unas vienen desde el amor, y otra desde el miedo.

Si tomas alguna decisión desde el amor, esa será la acertada. Aunque después no sea lo que esperabas, elegir desde el amor siempre es lo correcto.

Si tomas alguna decisión desde el miedo, esa decisión, por más bien que lo hayas hecho, será la errónea. Así de sencillo.

Comienza a elegir desde el amor. No tomes decisiones por miedo a lo que digan los demás, o por miedo a fracasar. Toma decisiones por medio de tu corazón e intuición. Por lo que sientes que realmente es lo correcto. Ese es el mejor consejo que te puedo dar para tomar buenas decisiones.

 

Espero que estos 10 consejos te ayuden a tomar mejores decisiones en tu vida. Si te ha ayudado, puedes apoyar con un comentario, y compartiendo este artículo con aquellas personas que sabes que necesitan este contenido.

 

¡Gracias por leer!

 

.

Comentarios

  1. Increíble artículo. Lo tomaré como una guía a seguir cada vez que tenga que tomar buenas decisiones. Saludos.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. ¡Gracias por leerlo! Me llena de alegría que te haya servido. Saludos desde República Dominicana

      Borrar

Publicar un comentario